Melasma: todas las dudas respondidas aquí

Conocido por las manchas marrones o grisáceas, el melasma es un problema de piel que puede afectar la autoestima de quien lo padece. Ven a saberlo todo sobre el melasma. 

¿Qué es el melasma? 

El melasma es una condición que causa hiperpigmentación de la piel debido al aumento de la melanina, que es la proteína que da color a la piel. Aparecen manchas irregulares de color marrón oscuro o marrón grisáceo que son muy comunes en el rostro, pero también pueden surgir en el escote y los brazos, y se dividen por tipos. 

¿Cuáles son los tipos de melasma? 

Grado 1 (epidérmico) 
Es el grado más reciente, cuando las manchas tienen menos de un año. Presenta una tonalidad marrón oscura y un delineado definido. Ocurre en la epidermis, que es la capa más superficial de la piel. Es un tipo que responde bien al tratamiento. 

Grado 2 (dérmico) 
Es el grado en el que las manchas tienen más de un año. Tienen una tonalidad marrón clara o azul grisácea y un borde menos visible, más difuso. Debido a que las células hiperpigmentadas están más profundas en la piel, en la dermis, el tratamiento es más lento. 

Grado 3 (mixto) 
Es el grado en el que las manchas tienen más de cinco años. Es el tipo más severo de la condición, presentando tonalidad marrón y azulada y de diversos tamaños. También es más resistente al tratamiento. 

¿Qué causa el melasma? 

La condición es crónica y puede reincidir incluso después de tratada. Es más frecuente en mujeres en edad reproductiva, entre 20 y 50 años: el 90% de los casos son mujeres y apenas el 10% hombres. 

El melasma puede ser genético: según la Unesp (Universidade Estadual Paulista), herencias genéticas encontradas en el ADN también pueden indicar predisposición. Además, hay otros factores de riesgo a considerar. 

Factores de riesgo del melasma 

No existe una causa principal del melasma, sino varios factores que pueden desencadenar la enfermedad. 

Aunque el melasma puede afectar a personas de todas las edades y etnias, es más común en mujeres en edad fértil, especialmente aquellas embarazadas o que usan anticonceptivos hormonales. Hay otros factores de riesgo importantes para el desarrollo del melasma, como: 

Mujeres adultas 
En Brasil, las manchas en la piel afectan entre el 15% y el 35% de las mujeres adultas, según investigación de la Unesp. Esto ocurre debido a los cambios hormonales asociados al embarazo, al uso de anticonceptivos hormonales y a la terapia de reemplazo hormonal. 

Las personas trans también pueden tener melasma, ya que al pasar por el proceso de transición de género y utilizar terapia hormonal hay un aumento en la producción de algunas hormonas, como el estrógeno, que pueden causar melasma y otras condiciones de la piel. 

Alta exposición solar 
La exposición excesiva al sol es uno de los principales factores de riesgo para el melasma. La radiación ultravioleta (UV) del sol estimula la producción de melanina en la piel, lo que lleva al aparecimiento de manchas oscuras. 

Luz azul 
La luz azul, como la de los dispositivos electrónicos, no causa melasma, pero puede aumentar la pigmentación de la mancha y alterar las fibras de colágeno, responsables de dar estructura y sostén a la piel, huesos, entre otros. 

Predisposición genética 
Tener familiares con melasma puede aumentar la probabilidad de desarrollar la condición. La predisposición genética desempeña un papel importante en la susceptibilidad al melasma. 

Raza y etnia 
Las personas con mayor cantidad de melanina en la piel tienen más probabilidad de desarrollar melasma, siendo más común en personas de piel negra. 

Para el diagnóstico del melasma, el profesional recabará todo tu historial personal y familiar, teniendo en cuenta la información genética y los hábitos de vida. En muchos casos se utiliza la lámpara de Wood, que es un examen para clasificar el grado de melasma. 

¿Cómo identificar el melasma con la lámpara de Wood? 

La lámpara de Wood emite luz ultravioleta (UV) en el rango de 320 a 400 nanómetros. Esta luz es invisible al ojo humano, pero al entrar en contacto con ciertas sustancias en la piel puede revelar algunas enfermedades. 

Es importante observar que el uso de la lámpara de Wood para diagnosticar el melasma es solo una parte del proceso de evaluación. El diagnóstico completo generalmente requiere una evaluación clínica detallada. 

¿El melasma tiene cura? 

Lamentablemente no, pero es posible atenuar las manchas mediante tratamientos específicos para cada caso. Algo que siempre se considera es la inclusión de un producto con FPS y FPUVA en la rutina: solo el protector solar protegerá la piel de la acción de los rayos y, junto con el medicamento o tratamiento indicado, reducirá las manchitas. 

Síntomas del melasma 

Como ya mencionamos, el melasma comienza con la aparición de manchas oscuras e irregulares que aparecen principalmente en el rostro, pero también pueden presentarse en áreas expuestas al sol, como el cuello y los brazos. Las manchas de melasma generalmente tienen bordes irregulares y pueden variar en color, desde tonos más claros hasta marrón oscuro. 

¿El melasma pica? 

No hay ningún tipo de molestia, dolor o picazón en las áreas manchadas, pero puede empeorar si aumenta la temperatura o hay contacto con productos que generan calor, como secadores de cabello, saunas, etc. 

Recuerda que si hay manchas de melasma en el rostro, es necesario proteger siempre todo el cuerpo, ya que la exposición solar en áreas sin melasma puede empeorar las que sí tienen manchitas. Aunque es raro, el melasma puede aparecer en la espalda, el cuello y las manos; por eso, el uso de protector corporal también es primordial. 

Lee nuestro artículo “¿Hace falta aplicar protector solar en todo el cuerpo?” haciendo clic aquí. 

¿Cómo prevenir el melasma? 

Uno de los mayores villanos en la formación del melasma es la exposición a la luz solar y a la luz visible, ya que la radiación ultravioleta, además de penetrar profundamente en la piel causando daños, tiene efecto acumulativo, lo que ocasiona marquitas. 

Los países tropicales, como Brasil, reciben altas tasas de radiación solar durante todo el año, pero aun así el 72,5% de la población brasileña no usa protector solar diariamente, según el Instituto de Cosmetología y Ciencias de la Piel, y eso contribuye al aumento de casos de la enfermedad. 

La mejor forma de prevenir el melasma es usar protector solar diariamente, incluso en días nublados y lluviosos, y principalmente en días más calurosos. El FPS evita la acción directa de la radiación solar sobre las células, así como protege las fibras de colágeno y elastina que ayudan a mantener la piel libre del envejecimiento prematuro. 

Otro punto al que prestar atención es la reaplicación del protector solar, que debe hacerse cada dos horas, así como combinar su uso con ropa y accesorios que protejan la piel, como gorras, gafas de sol y camisas de manga larga. 

¿Qué puede empeorar el melasma? 

Exposición al sol sin protección solar 
La exposición al sol desencadena una respuesta natural de la piel para protegerse de los daños causados por los rayos ultravioleta (UV). Esto incluye el aumento en la creación de melanina. En las áreas donde el melasma ya está presente, la melanina se encuentra desregulada, causando manchas oscuras. La exposición al sol intensifica esa producción excesiva, agravándola. 

Para evitar el empeoramiento del melasma, el uso de protección solar es fundamental. Solo el protector solar tiene la función de crear una barrera física o química que absorbe o refleja los rayos, impidiendo que alcancen las capas más profundas de la piel y causen daños. 

No reaplicar el protector solar 
La falta de reaplicación del protector solar empeora el melasma, ya que el producto va perdiendo eficacia con el paso de las horas. 

La SBD (Sociedad Brasileña de Dermatología) recomienda reaplicar cada dos horas; así se evita que la piel absorba por completo el producto. En caso de sudor excesivo o contacto con agua, el intervalo entre reaplicaciones puede acortarse. 

La cantidad correcta también influye muchísimo en la protección de la piel. 

Consulta en este artículo cuál es la cantidad de protector solar para cada tipo de producto. 

Es importante que la aplicación y la reaplicación se hagan también en días nublados o lluviosos e incluso si no hay exposición directa al sol, ya que los rayos solares atraviesan nubes y ventanas. 

No usar productos adecuados para el melasma 
Una de las cosas que puede empeorar el melasma es no prestar atención al tipo correcto de protector solar. 

Al elegir el protector solar para melasma, fíjate en el FPS, pues según la SBD se indica que el factor de protección para personas con esta condición sea, como mínimo, 50. 

Además del FPS, es primordial que el protector solar para melasma proteja también de los rayos UVA, lo cual es común en los protectores con color, ya que este tipo posee pigmento que, además de proteger de los rayos solares, también ayuda a proteger contra la luz azul. 

Siempre hay que buscar productos adecuados para tu tipo de piel para evitar otras cuestiones como acné, puntos negros y oleosidad. Elige productos no comedogénicos y evita los que contengan ingredientes agresivos o que sepas que te causan irritación. 

Ollie cuenta con productos con alta protección solar contra los rayos UVA y UVB y activos que tratan la piel. Conócelos haciendo clic aquí. 

Estar muy cerca de fuentes de calor 
Las fuentes de calor agravan el melasma, pues pueden llevar a un aumento en la producción de hormonas como el estrógeno, asociado al desarrollo del melasma. 

Una señal clara es que, normalmente, hay empeoramiento de la condición en verano. Otras fuentes de energía, como el calor del secador de cabello, el horno o la estufa, duchas muy calientes, entre otras, pueden aumentar o pigmentar aún más las marcas. 

Un consejo es utilizar siempre protección solar para evitar ese empeoramiento. 

Exceso de estrés 
De acuerdo con investigaciones, el estrés crónico está asociado a un estado inflamatorio persistente en el cuerpo que activa un tipo de gen que estimula el exceso de pigmento y causa la peoría del melasma y también del vitíligo. 

Falta de hidratación de la piel 
Cuando la piel está deshidratada, su barrera protectora natural se ve comprometida. Esto la vuelve más susceptible a irritaciones e inflamaciones que pueden agravar la condición, además de dejar la piel más opaca y sin brillo, haciendo las manchitas más visibles. 

No mantener una alimentación saludable 
Una alimentación no saludable puede resultar en deficiencia de nutrientes esenciales para la salud de la piel, como vitaminas, minerales y antioxidantes. Estos nutrientes desempeñan un papel importante en la regulación de la melanina y en la protección contra los daños causados por los radicales libres. 

Hay alimentos que empeoran el melasma, como el exceso de azúcar y los ultraprocesados; estos contribuyen a aumentar los niveles de inflamación en el cuerpo. 

¿Cuál es la relación del melasma con la limpieza del hígado? 

A pesar de que la información aparece en fuentes no científicas, como blogs de belleza y bienestar, la relación del melasma con la “limpieza” del hígado o la desintoxicación no ha sido comprobada por estudios clínicos y, por eso, la respuesta es no: la limpieza del hígado no cura ni trata el melasma. 

¿Es posible “desinflamar” el melasma? 

No es posible “desinflamar” el melasma. Esto se debe a que esta condición no es una inflamación, sino una hiperpigmentación causada por el aumento de producción de melanina en ciertas áreas de la piel. 

Melasma en el embarazo 

El melasma en el embarazo, también conocido como “cloasma” o “máscara del embarazo”, es una condición dermatológica caracterizada por la aparición de manchas oscuras e irregulares en la piel, principalmente en el rostro, aunque también puede presentarse en otras partes del cuerpo, como el cuello y los brazos. Estas manchas son generalmente de color marrón o pardo y tienen una forma irregular, similar a una máscara, de ahí el nombre “máscara del embarazo”. 

La causa del melasma en el embarazo está relacionada con factores hormonales, principalmente el aumento de los niveles de estrógeno y progesterona durante la gestación. La exposición al sol también desempeña un papel importante en el desarrollo del melasma en el embarazo, ya que la radiación ultravioleta puede estimular la producción de melanina, el pigmento que da color a la piel. 

Es importante resaltar que el melasma no es perjudicial para la salud, pero puede causar un malestar estético significativo para algunas mujeres. Además, las manchas tienden a oscurecerse durante el embarazo y pueden persistir después del parto. 

¿Cómo prevenir el melasma en el embarazo? 

Protección solar: 
el uso de protector solar con alto FPS y la protección de la piel con ropa, sombreros y gafas de sol son fundamentales para evitar el agravamiento de las manchas de melasma debido a la exposición solar. 

Evitar la exposición solar excesiva: 
evitar la exposición al sol en horarios de pico y en días muy soleados puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar o empeorar el melasma. 

Cuidados con la piel: 
el uso de productos para aclarar la piel con melasma, como cremas y pomadas, puede ser recomendado por un dermatólogo. Sin embargo, es primordial que estos productos se usen bajo supervisión médica, especialmente durante el embarazo, para garantizar su seguridad. 

Es importante destacar que el melasma en el embarazo puede ser persistente y, en algunos casos, puede no desaparecer por completo tras el parto. Por lo tanto, es fundamental consultar a un dermatólogo para obtener orientación adecuada sobre cómo manejar y tratar esta condición de forma segura durante la gestación y después del nacimiento del bebé. 

¿Cuál es el mejor protector para melasma? 

Al elegir el protector para melasma, considera los siguientes puntos: 

1. Verifica el FPS (Factor de Protección Solar) 
El FPS indica el grado de protección contra los rayos UVB, responsables de causar quemaduras solares. Para quienes tienen melasma, la Sociedad Brasileña de Dermatología indica FPS entre 50 y 60 para evitar la estimulación de la producción de melanina por las quemaduras solares. 

Además del FPS, es primordial que el protector solar para melasma ofrezca protección contra los rayos UVA, que son los que penetran profundamente en la piel, causando y agravando las manchitas de la enfermedad, además de provocar envejecimiento prematuro. Asegúrate de que el protector tenga la descripción “amplio espectro” o “protección UVA y UVB” en la etiqueta. 

2. Prefiere protector solar con color 
El protector solar con color para melasma es un gran aliado en el tratamiento. Ven a descubrir por qué. 

Crea una capa extra de protección 
El protector solar con color posee pigmento que, además de proteger de los rayos solares, también ayuda a proteger contra la luz azul. El pigmento presente en la fórmula contiene óxido de hierro, uno de los activos que aportan color, y absorbe la radiación visible, minimizando el efecto de la luz. En otras palabras, el pigmento crea una capa extra de protección, además de uniformar el tono de la piel, siendo un excelente protector solar para el rostro con melasma. 

Posee protección física y química 
Este tipo de producto ofrece tanto protección física como química. La protección física la proporcionan los pigmentos minerales, como el óxido de zinc, que reflejan la luz del sol y actúan como una barrera física en la piel, evitando que los rayos ultravioleta alcancen la superficie. Además, contiene filtros químicos que absorben y disipan la radiación UV. Esta combinación de protección física y química es más eficaz en la prevención del melasma, ya que bloquea los rayos solares antes de que estimulen la producción de melanina. 

El Protector Solar en Barra con Color de Ollie tiene cobertura media, similar a una base, además de FPS 95 y FPUVA 40. Ven a conocerlo haciendo clic aquí. 

Cobertura de las manchas oscuras 
El protector solar con color para melasma ofrece cobertura adicional de manchas, disimulándolas y dejando un efecto más uniforme. Esta cobertura puede ayudar a mejorar la apariencia de las manchas mientras protege la piel de los rayos solares. ¡Todo, ¿no?! 

3. Busca protector solar con activos que ayuden a controlar el melasma 
En el mercado hay protectores solares con activos que ayudan a mejorar la apariencia de las manchas de melasma, como la vitamina C, que inhibe la producción de melanina, disminuyendo la formación de manchas. 
La vitamina C también ayuda a reducir la degradación de la piel, estimulando la producción de colágeno, mejorando la hidratación y la elasticidad, además de potenciar la protección solar, ya que neutraliza el efecto de los radicales libres y, cuando se combina con el protector, aumenta la capacidad de defensa de la piel contra esos radicales provenientes de la exposición solar. 

4. Elige el tipo de protector adecuado para tu piel 
Cada tipo de piel tiene necesidades específicas. 

Para piel seca, se indica un protector con fórmula hidratante. Al buscar un protector para melasma para piel grasa, opta por los de toque seco y libres de aceite. Para piel mixta, puedes usar un protector que atienda a las necesidades de ambas zonas del rostro. 

¿Cuál es el tratamiento para el melasma? 

Hay algunas opciones que pueden ayudar a aclarar el melasma. Es importante recalcar que es primordial consultar a un dermatólogo de confianza. Un profesional evaluará tu tipo de piel, la gravedad del melasma y prescribirá productos específicos para tu caso. Nunca te saltes esta etapa: busca siempre ayuda médica. Dicho esto, vamos a los consejos de tratamiento para el melasma: 

Elige un protector solar adecuado 
El protector solar es el producto más importante en la prevención y el tratamiento de esta condición. 

Prefiere protector con color, ya que posee pigmento, lo que crea una capa extra de protección y uniformiza el tono, disimulando las manchitas. 

Úsalo diariamente, reaplicándolo cada dos horas cuando estés al aire libre. 

Prefiere productos aclarantes 
Los productos con activos aclarantes ayudan a reducir la pigmentación de las manchas de melasma. Algunos ingredientes eficaces incluyen hidroquinona, ácido kójico, ácido glicólico, niacinamida y vitamina C. Estos productos deben usarse conforme a las orientaciones del dermatólogo. 

No olvides hidratar la piel 
La hidratación adecuada ayuda a mantener la barrera cutánea saludable. Una barrera comprometida puede hacer la piel más susceptible a daños y agravar el melasma. 

Los productos específicos para tratar el melasma, como los que contienen ingredientes aclarantes, pueden resecar o irritar. La hidratación ayuda a minimizar la irritación y la sensibilidad. 

Evita productos irritantes 
Evita productos para el cuidado de la piel que contengan ingredientes irritantes, como alcohol, fragancias fuertes y exfoliantes abrasivos. Estos productos pueden sensibilizar la piel y agravar el melasma. 

¿Cuál es el mejor producto para aclarar el melasma? 

Existen diversos activos que pueden ayudar a aclarar las manchas de melasma. Mira los más comunes: 

Hidroquinona 
La hidroquinona es uno de los ingredientes más eficaces para aclarar el melasma. Sirve para inhibir la producción de melanina, aclarando manchas de acné, melasma, marcas del embarazo, psoriasis, eccema, entre otras. Puede encontrarse en gel o crema, en concentraciones del 2% al 5% según el producto. 

Se requiere acompañamiento médico tanto para la prescripción como para analizar los resultados. 

Ácido kójico 
El ácido kójico es un agente aclarador suave que ayuda a inhibir la producción de melanina. Presente en diversos dermocosméticos, es una sustancia derivada de hongos con alta acción despigmentante que bloquea la tirosina, un aminoácido necesario para la producción de melanina. 

Ácido glicólico 
Mucho más conocido que los anteriores, el ácido glicólico ayuda a disminuir el melasma por ser un exfoliante suave que mejora la textura de la piel y reduce la apariencia de las manchas. 

Actúa estimulando la eliminación del exceso de pigmento de la piel, mejorando la apariencia de las manchitas. Además de usarse en pieles con melasma, también está indicado para pieles con acné, pues desobstruye los poros y retira el exceso de células muertas. 

Niacinamida 
La niacinamida, una forma de vitamina B3, ayuda a disminuir la pigmentación de la piel y mejorar la uniformidad del tono, además de fortalecer la barrera cutánea. 

Vitamina C 
La vitamina C es un antioxidante que puede ayudar a reducir las manchas y a combatir los daños causados por el sol. Tiene acción antioxidante, uniformiza el tono de la piel y estimula la producción de colágeno; cuando se combina con la protección solar, potencia la defensa de la piel frente a los rayos UV. 

Otro consejo para elegir productos para melasma es combinar activos aclarantes con protección solar, uniendo practicidad y cuidado. 

Tratamientos caseros para el melasma 

En internet hay varios consejos de tratamientos caseros para el melasma, como aplicar sábila (aloe), rosa mosqueta, entre otros; pero es importante tener en mente que, aunque parezcan una opción más barata y conveniente, los tratamientos caseros no tienen respaldo científico. Muchas soluciones caseras se basan en tradiciones populares o creencias culturales, pero no han sido sometidas a estudios clínicos rigurosos que confirmen su eficacia. 

Algunos tratamientos caseros, como aplicar jugos, limón, bicarbonato o vinagre directamente en la piel, pueden ser irritantes y causar inflamación, empeorando el melasma en lugar de mejorarlo, además de provocar reacciones alérgicas que pueden volver la condición aún más incómoda e incluso retrasar el tratamiento del melasma. 

Por eso, consulta siempre a un dermatólogo para tener el tratamiento ideal. No confíes en métodos que enseñan cómo aclarar la piel del rostro rápidamente; busca un profesional calificado para evaluar tu melasma, ¿de acuerdo? 

Protección para melasma y Ollie 

Ollie cuenta con una línea increíble de productos con FPS que pueden ayudarte a protegerte del sol y evitar el melasma. Hay para todos los gustos: con color, sin color, para labios, boca y mejillas, y para el cuerpo. 

El Tinted Sunscreen Stick es la protección solar ideal para quienes tienen melasma. Con FPS 90, FPUVA 40, ácido hialurónico, vitaminas C y E, acabado aterciopelado; además es perfecto para todo tipo de piel, suaviza manchas de acné y melasma y tiene toque seco, con cobertura tipo base.